Ahorro de energía

19
186
blog literario

La batería de mi notebook es de baja duración. Mi cervical, también. En la mesa, pongo a disposición un enchufe. Recibo, en retribución, el último paquete de Cerealitas. El día se tolera permutando cortesías.

Las paredes que habitamos se nos han vuelto hostiles. Intercalamos las onomatopeyas de la obra en construcción (CLANG-CLANG, PUM-PUM) con la rigidez idiota de la silla del comedor. Se me adormecen las piernas y los hombros. Se le tilda el CPU. Esta tarde, el sopor apelmazante del cerramiento nos llevó a soñar con un asalto de gotas -bien gordas- que transformara el lago lodoso en una olla en ebullición. La tormenta duró sólo un minuto. Con renovada sed de petricor nos adentramos en un delirio febril. Malgastamos electrodos y neuronas en el universo de ambigüedades que cabe en un signo de admiración.

¿Quién lo diría? Aquí seguimos. Siempre adelante, como diría el abuelo. A veces, invisibles. Les ruego comprensión. No es fácil esto de crear mundos.

La novela ya tiene nombre. Un buen día se los haré saber.  

NATALIA DOÑATE

19 Comentarios

  1. Hablando de CPU, tuve que cambiarle el disco, se me tildaba, ese es el motivo de por qué tardé tanto en leerte, no puedo usar el celular para ciertas funciones, por ejemplo: leer. Me duele la vista, gracias Natalia, por tu envío y por seguir creando.

  2. Un buen preludio como para incentivar a la curiosidad. Tiene un solo riesgo. Prepararnos y que el monte termine pariendo un ratón!! . Sé que no va a ser así. Bs

    • Jaja no lo descarto. Por suerte, no creo en «quemar» los proyectos. Así que me limitaré a ser el zorro del principito, disfrutando la anticipación 😉

Te invito a dejarme un comentario :)